Fue este jueves 12 de septiembre y contó con la presencia de la maestra y dirigente sindical Marta Maffei.

A 51 años de la fundación de la CTERA, Idearios desde el Sur IEF presentó en la sede de la CTA un cuaderno sobre la militancia y los aportes teórico conceptuales de Marta Maffei.

Daniel Godoy, coordinador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, junto con Tomás Raffo, dijo al abrir la presentación: “La idea conceptual de Idearios desde el Sur es rescatar lo sustantivo del pensamiento político nacional y popular, del pensamiento emancipatorio. Este es el 5to fascículo que hacemos con el equipo (Violeta Godoy, Fermín Arocena e Inés Hayes en la investigación y redacción, Cecilia Fernández Lisso y Sofía Goñi en la propuesta estética y Viviana Santarán en la logística): comenzamos con Alcira Argumedo, Horacio González, John William Cooke, Dora Barrancos. Cada dossier busca personajes que tienen dos características: que su obra, su pensamiento y su trayecto hayan dejado marcas en la época, de carácter intelectual y ético y por otro lado, la trascendencia en la idea de configurar un mapa que pudiera dar cuenta de una mirada reflexiva sobre la importancia del pensamiento político en esta época”.

El coordinador del IEF dijo además que: “Hoy asistimos a un cambio de época en el que necesitamos volver a revisar estas ideas. Marta lo dice en la entrevista en Canal Abierto, lo de volver a repensar los sueños colectivamente para llevar adelante la emancipación y la descolonización. Dentro de los ámbitos de producción de conocimiento de la clase obrera organizada, debemos valorizándonos como sujetos decisivos en los destinos de nuestro país, pero también tenemos la necesidad no solo de recordar nuestras éticas sino también de repensar el qué, el para qué y el cómo. Necesitamos problematizar permanentemente sobre el relato y las prácticas colonizadoras. Y allí radica la importancia que le damos al proyecto Idearios desde el Sur y en ese sentido, el pensamiento y la acción de Marta Maffei se vuelve trascendental”.

Durante la presentación se pasó un video realizado por Nicolás Honigesz y el área de prensa que dirige Federico Chechele, sobre la trayectoria militante de Marta y otro sobre saludos que llegaron desde todas las geografías y organizaciones de nuestro país.

Inés Hayes, coordinadora de Idearios desde el Sur, dijo: “Hicimos una entrevista muy larga con Marta por zoom y ahí nos enteramos que fue su papá quien la incentivó a que comenzara el camino sindical por los derechos de los y las docentes y que fue su maestra de 6to grado la que le dijo ‘Marta vos tendrías que estudiar magisterio porque tenes una capacidad muy interesante de explicar y hacerte en tender’. Y Marta cuenta que cuando sus compañeros y compañeras tenían alguna dificultad en Matemáticas, sobre todo, ella los ayudaba así que este espíritu de solidaridad de Marta viene desde que era muy pequeña. También cuenta en el cuaderno, que cuando se fundó CTERA en 1973, los y las maestras lloraban de emoción por haber conseguido ese logro tan importante”.

“En cada lugar por el que transitó formó organización sindical, redes, amigos, amigas, compañeros y compañeras y sembró esta semilla que hoy está sembrando entre nosotros y nosotras que es la solidaridad y pensar que otro mundo es posible y como decía en la entrevista con Gladys de Canal Abierto, lo que está pensado lo podemos volver a pensar de otra manera, desde el pensamiento descolonial, desde nuestras propias prácticas, históricas, desde cómo nos contamos a nosotros y nosotras mismas nuestra historia y esto es muy importante en su vida docente, sindical, militante”, detalló Hayes, junto a sus compañeros de equipo Violeta Godoy y Fermín Arocena. Y rescató las emotivas palabras del prólogo escritas por el sociólogo José Seoane.

Roberto Baradel, secretario general de la Suteba, secretario general de la CTA de los trabajadores de la Provincia de Buenos Aires, adjunto de CTERA, sumó su voz: “Hacerle un homenaje a Marta es fundamental porque es una de esas compañeras entrañables que encabezó una lucha que dejó una marca en nuestro pueblo: la fundación de la CTERA, de la CTA, la Carpa Blanca. Marta en toda su trayectoria le hizo honor a los compañeros y compañeras detenidas desaparecidas, por eso tenemos que seguir haciendo con nuestro compromiso que cada minuto de esos compañeros haya valido la pena y Marta con su accionar lo hace en cada momento”.

Luego fue el turno para Marta, que brindó una clase magistral: “El Instituto trabaja en renovar el pensamiento nacional y popular capaz de incidir en el escenario en el que estamos viviendo. Idearios rescata memorias de las luchas populares, de protagonismo del pueblo contra estas oleadas neoliberales que intentan cada vez más y ahora fuertemente, salvar a los Estados Unidos en su declinación. 100 mil millones de pesos destinaron para que Patricia Bullrich pueda armar un ejército paralelo, que según la ministra es para otorgar seguridad para los inversores y para los que vendrán por el RIGI. ¿Qué es seguridad para este gobierno: es la vida de los jubilados? No: es controlar, es dispersar, es agredir, es perseguir, es amenazar, es intimidar, es gasear, es imputar penalmente a los que participan de una marcha, de una organización, de una asamblea en defensa de sus propias vidas y de lo que les están haciendo”.

“Los compañeros rescatan en este trabajo una resistencia que viene de lejos, que no empecé yo, pero es cierto que la Carpa Blanca fue un modelo, una forma de lucha contra el Menemismo que tuvo un énfasis especial para dividir. Había acordado implementar el sistema educativo del Banco Mundial que era para formar mano de obra barata. No querían trabajadores insumisos que confrontaran con las empresas y fue astuto en su decisión de cómo hacer, especialmente entendieron que el éxito de la gestión estaba en la fragmentación, en destruir la unidad. Querían destruir todo lo que habíamos hecho, por ejemplo con la CTERA que pasamos de 143 gremios, a 24, trabajamos muchísimo en la unidad, contra la fragmentación: pudimos entender que todos y todas éramos trabajadoras. Y eso lo entendió perfectamente el menemismo cuando transfirió la educación a las provincias pero sin fondos”.

La docente rescató la historia de lucha de su organización: “Cuando tomamos la CTERA en el 97 que armamos la carpa blanca teníamos provincias que estaban de paro por 6 meses, los compañeros y compañeras de Tucumán estuvieron un año sin cobrar. La Carpa fue poder juntarnos. Íbamos hacer una semana de ayuno y Hugo Yasky muy previsoramente dijo la vamos a alquilar por 15 días y estuvimos 1003 días y fue una experiencia alternativa para nosotros también y para toda la comunidad que la usó para denunciar lo que pasaba: el crimen de María Soledad, de Miguel Bru, el de José Luis Cabezas. La inteligencia nuestra fue encontrar la forma en que sin pelearnos con la comunidad sumábamos al conjunto y pudimos visibilizar la estrategia del poder. Entendimos que la educación no era el único blanco del neoliberalismo, el saqueo, el despojo incluía a millones, a familias, jóvenes. CTERA se fundó el 11 de septiembre de 1973, cuando se cumplía además el aniversario del asesinato de Salvador Allende”.

Tal como rescató Baradel sobre la experiencia de Marta, la militante contó que “a Isauro Arancibia lo mataron el 24 de marzo de 1976, el primer día del golpe de Estado, lo mataron trabajando en el sindicato, como a su hermano, en Tucumán. Nosotros y nosotras trabajamos por ir en contra de las miradas colonizadoras hasta en los manuales como Estrada, como Kapeluz y decíamos no somos la segunda mamá, somos educadores y no es nuestra responsabilidad darles de comer a nuestros pibes, lo hacíamos porque no había otra alternativa porque sin comer no pueden aprender, pero es responsabilidad del Estado, no de las escuelas”. En ese sentido contó que cuando trabajaba en Neuquén, en el turno tarde, tenía un nene que solo preguntaba cuándo llegaba la merienda y qué había de comer: no se podía concentrar porque tenía hambre.

“Entendimos, como nos decía Paulo Freire, que la educación es clave para la descolonización, para la emancipación, para transformar la realidad, es trabajar para salir de la adversidad, la escuela es para aprender a construir alternativas. Nos llamó a ser capaces de ver la realidad críticamente y pienso hoy que desde las escuelas y desde los sindicatos cómo aprender juntos y juntas qué hay que hacer y cómo hay que hacerlo. Tenemos que ser capaces de reunir lo diferente, compatibilizar nuestras diferencias para poder salir. Tenemos que pensar cómo hacemos para resistir construyendo lo nuevo para toda la vida, aprender a leer el texto pero también el contexto porque nada es natural, todo es fabricado, construido porque se construye desde la acción pero también desde la omisión”, dijo Marta.

“No naturalizar es ver cómo encontramos juntos y juntas un camino para liberarnos de la dominación, es una disputa por el sentido, por eso necesitamos un sujeto político alternativo: o es el pueblo o no hay cambio. Cómo puede ser que la deuda externa sea igual a los capitales fugados, no puede ser que siempre pague el pueblo. Cómo puede ser que Sturzeneger de un menú para que las empresas elijan cómo despedir a sus trabajadores, o que la policía entre a la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo o que haya más de 200 mil despidos de los y las trabajadoras del Estado”, agregó ante la escucha atenta de todos y todas.

También recordó cómo se salvó de la dictadura: “El día que me fueron a buscar a la escuela, en la dictadura, no fui porque mis hijos estaban con varicela y la directora tomó una decisión heroica: cuando vio al ejército con los tanques afuera, dijo vienen por Marta y tiró mi libreta y cuando entraron y preguntaron por mí, les dijo que me había ido a Uruguay, que ya no trabajaba más ahí. Así que me salvó la varicela y la directora, por su puesto. Lo que me enseño mi papá y sigo pensando: lo único que está prohibido es rendirse. La presencia de todos ustedes me dice que algo de razón tenía”.

Antes de cerrar el homenaje, Hugo “Cachorro” Godoy, secretario general de la CTA, le hizo entrega de un cuadro pintado por la artista Karina Beltrán, que recoge la lucha docente y de la Central.

“Ha sido una impresionante clase política y educativa de Marta. Hace unos días por obsequio de mi hijo estaba leyendo a Enrique Dussel, extraordinario filósofo y teórico de la liberación y él dice que el pensamiento descolonizador tiene 3 momentos: la liberación nacional, la liberación social y la liberación cultural. A medida que la escuchaba a Marta reflexionaba sobre estas palabras de Enrique y qué tan bien expresadas que en una historia de vida como la que se expresa en Idearios desde el Sur”, dijo Cachorro.

“Para nosotros era muy importante la presencia de Marta porque la Central tiene 31 años y marta fue una de las fundadoras y sigue siendo una apuesta de que el pensamientos nacional, popular, revolucionario se transforme en poder popular porque no hay otra manera de modificar esta condición de país colonial en la que estamos en este momento, uno de los momentos más oscuros y más profundos de los abismos. Creo que no solamente la palabra que nos invita a no resignarnos sino también a construir más unidad del movimiento popular. Así como fuimos capaces de poner esto en marcha vamos a ser capaces de redoblar la apuesta, de conformar la unidad en la diversidad y de estas experiencias concretas de vida, seguiremos aprendiendo y gracias Marta por ayudarnos a mirarnos en tu espejo”, concluyó el dirigente con el aplauso emocionado de todos y todas.

Al finalizar, la organización Che Pibe le entregó unos dibujos hechos por sus niñes de jardín de infantes y  de la primaria.

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