Con la presencia de la socióloga Mariana Gainza y el Secretario General de la CTA, Hugo Cachorro Godoy, se realizó en la sede de la Central una nueva etapa del Seminario para profundizar sobre el pensamiento de Horacio González.

A continuación el video completo del encuentro:

El segundo encuentro del ciclo que comenzó con Alcira Argumedo en agosto, fue esta vez sobre el pensamiento de Horacio González y contó con la presencia de la socióloga, amiga y ex alumna de González, Mariana Gainza. Participaron dirigentes y dirigentas de todo el país: de Ushuaia, Chubut, Santa Fe, Buenos Aires, Misiones, Río Negro y de Uruguay.

Cachorro Godoy, secretario general de la CTA, dejó su saludo y reflexión: “Hay una cooptación y control de ese conocimiento colectivo científico y tecnológico del que se apropian los sectores dominantes que hace que hoy la disputa no sea solamente en el plano de los territorios. Este extractivismo se desarrolla en un territorio más abstracto, menos material, con el fin de consolidar el coloniaje en nuestros territorios. Estamos en un tiempo de mayores complejidades para el desarrollo de un pensamiento propio, de un ideario convertido en estrategia de poder y por eso recuperar la memoria, el pensamiento, leer y releer autores como en este caso Horacio González, Alcira Argumedo, John William Cooke u otros nacidos de las entrañas del movimiento popular como Germán Abdala o Agustín Tosco o Rodolfo Walsh que hoy recordábamos la experiencia en la comunicación de la CGT de los argentinos, es fundamental”.

“La idea de releerlos no es sacar esos viejos textos de lugares apolillados sino de ponerlos en valor en su capacidad creadora para que el núcleo principal de esos pensamientos nos sirvan para enriquecernos y encontrar las respuestas que hoy necesitamos. Necesitamos la unidad de la creatividad de los pueblos para construir estrategias de poder emancipatorias, por eso estamos sumamente orgullosos que compañeros y compañeras de distintas generaciones que hoy habitan nuestra Central podamos estar desarrollando iniciativas como éstas que apuntan a que estos debates no queden reducidos a núcleos de militantes interesados sino que cada uno de nosotros y de nosotras que participamos de estos encuentros podamos convertirnos también en multiplicadores de estos debates a lo largo y a lo ancho de todo el territorio”, dijo el dirigente.

Violeta Godoy, integrante de Idearios desde el Sur, contó que “Horacio ingresó a la Carrera de Sociología en la década del ‘60, época de revoluciones en todo el mundo. Fue una década en la que existió un gran convencimiento en los trabajadores, estudiantes, profesionales, de que las ideas transformadoras que se estaban gestando podían efectivamente llevarse a la práctica, a una realidad concreta”.

Violeta dijo además que “quisimos ahondar en la experiencia de Horacio como estudiante y como docente porque muchos compañeros con los que hablamos para hacer el fascículo concuerda en que Horacio era un distinto, era alguien que siempre encontraba el ámbito para generar instancias de reflexión, era descontracturado, performático en su manera de enseñar. Formó parte de las cátedras nacionales con Alcira, Roberto Carri, Susana Checa, desde donde rechazaron la neutralidad del campo científico, con la voluntad de construir y expandir la idea de que la ciencia y la sociología podían realmente tener un poder transformador”.

Luego fue el turno de Fermín Arocena, también de Idearios desde el Sur, que aportó: “Horacio reconoce que detrás de cada trabajador y trabajadora, sea de la rama que sea, hay una concepción humanista y creadora del trabajo, en tanto que los y las trabajadoras aportan con sus cuerpos y con sus ideas a la sociedad en la que vivimos, es eso lo que Horacio rescata para construir un movimiento nacional y popular con una concepción humanista del trabajo que se contrapone justamente con una noción que se impone todos los días desde el poder que es una noción productivista del trabajo que se nos impone que todo el día tenemos que estar produciendo y acostarnos pensando en la productividad”.

Ante todos y todas Arocena invitó a pensar: “No puede ser que en el mundo moderno en el que producimos 10 veces más que en el siglo XIX trabajemos lo mismo o más que en el XX. La idea de Horacio era construir un movimiento democrático que democratizara las instituciones obreras y populares y que permita luchar contra la opresión del productivismo”.

Inés Hayes, docente universitaria y coordinadora de Idearios desde el Sur, dijo: “en el capítulo Humanismo y terror de La palabra encarnada, compilado por María Pía López y Guillermo Korn y editado por Clacso, Horacio decía que la plusvalía en la actualidad no es la que analizó Marx en 1867 porque hoy no se trata sólo de la de la producción directa de excedentes no remunerados del trabajo sino que se amplía a las esferas jurídicas, simbólicas, comunicacionales y subjetivas. Un poco retomando el concepto de socio metabolismo del Capital de Meszaros y que trae Gruner, la idea es que el capitalismo está en todas las esferas de nuestra vida, aun cuando dormimos. El capitalismo nos construye ontológicamente, nos dice qué tenemos que consumir, que pensar, que sentir, cómo nos tenemos que relacionar”.

“Gruner dice que el capitalismo se ha tragado hasta la máquina de pensar, hasta el pensamiento crítico. Horacio pensaba todo el tiempo en cómo se podía salir de esta encerrona del capitalismo. El capitalismo aparece no con la forma de una mercancía objetiva o material, decía Horacio, sino bajo el llamado de una construcción imaginaria del yo. Una de las posibles salidas de este encierro del capitalismo, decía Horacio, es volver a pensar y a preguntarnos qué es el humanismo y cómo construimos humanismo aun dentro de este sistema. Y a ese concepto, a esa palabra le agrega la palabra crítica. Por eso él pensaba que todas las organizaciones del campo popular (feministas, de diversidades, ambientales, sindicales, de derechos humanos, etc) debían unirse en un mismo frente para luchar contra este enemigo en común”.

Mariana Gainza, socióloga, profesora universitaria, amiga y alumna de Horacio en los ’90, comenzó: “En sus últimos años, Horacio nos propuso repensar la noción de humanismo. No un humanismo a secas, sino un humanismo crítico. Como modo de convocar a un movimiento colectivo de pensamiento que tenga la disposición de investigar y buscar en las tradiciones más heterogéneas y en muy distintos estilos de reflexión las bases prácticas y teóricas para un nuevo anti-capitalismo, un anti-capitalismo reformulado. Humanismo crítico como “el otro nombre que respira hacia adentro para decir anticapitalismo”.

“El punto de partida de la reflexión para Horacio siempre fue el de la incomodidad.  Para él, la incomodidad tenía un valor político y teórico: la incomodidad era una pre-condición de la crítica. Lo dice explícitamente en una charla en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, en el año 97, en un aula repleta de gente, en un edificio que se caía a pedazos (acompañando el deterioro general de las condiciones de vida en la argentina de Menem y la convertibilidad de Cavallo). Horacio pensaba y hablaba en público sin dejar de prestar atención a la situación de los cuerpos reunidos. Esa vez nos decía: “en la incomodidad de los cuerpos reunidos siempre hay una promesa. De esa incomodidad puede surgir un nuevo horizonte de reflexión”, dijo Gainza.

“En aquella charla hablaba sobre el Che, en el contexto de la Cátedra Libre Che Guevara, que había surgido en esos años en la facultad –como una de las tantas iniciativas de resistencia a las políticas neoliberales del menemismo. Hablaba del humanismo del Che. Y lo hacía en términos muy próximos a los de su último libro / póstumo Humanismo. Impugnación y resistencia. Decía que la idea del “hombre como sujeto de la política” pertenecía a una antiquísima tradición filosófica occidental, que “nuestra época” había terminado por rechazar por buenas razones. Sin embargo, era necesario seguir pensando ese “humanismo” desacreditado por la filosofía contemporánea (que había concordado con la fórmula de la “muerte del hombre”, como síntoma de una crisis cultural más vasta). Porque siempre vale la pena volver sobre viejas palabras –no para repetirlas, sino para ponerlas como lugar de un problema. Las viejas palabras pueden dar lugar a nuevos pensamientos”, explicó Mariana ante la atención de todos y todas.

Y continuó: “La pregunta-problema, en esa ocasión, era saber si la tradición humanista del Che –reconsiderada y reflexionada– podía presentarle un debate a la época y a sus “verdades conquistadas”. Bajo una inquietud más general, que HG formulaba así: ¿aún es convocante lo humano, como invitación a unas prácticas colectivas diversificadas? HG hacía algo valioso con cierto sentimiento de anacronismo que lo tomaba al leer aquellos textos de los años de la revolución latinoamericana– y llegaba a definiciones como esta: “El tema de la política es si hay enlaces entre generacionales o si no hay enlaces: si pueden haber generaciones vacías o momentos vacíos, sin palabras, en la historia”. Un gran problema para pensar hoy”.

Luego del agradecimiento a Mariana por venir a la Casa de los y las trabajadoras, Claudia Baigorria, secretaria general de la CTA de Santa Fe, celebró el encuentro: “que hoy las trabajadoras de Casas particulares hoy tengan un convenio colectivo de trabajo y que tengan la posibilidad de tener un trabajo formal y que cada vez que viene un aumento se anuncia por cadena nacional es una conquista enorme, es conciencia de clase, es la organización de las condiciones para que esas transformaciones se den. Hay conciencia colectiva de lo que no queremos y de que vienen por nosotres, por nuestros derechos y por nuestros cuerpos, por nuestros territorios y ya no queda más nada. Esta semana se creó la Universidad Nacional de Madres de Plaza de Mayo y la Unesco reconoció a la Ex Esma como patrimonio de la humanidad, son dos signos fuertes que me traen a Horacio también como militante de derechos humanos”.

Tomás Raffo, economista y co-coordinador del IEF, junto a Daniel Godoy, compartió su experiencia: “cada vez que invitamos a Horacio a la CTA, siempre estuvo. Horacio estaba en la cultura universal, escribiendo sobre economía y sobre Borges, siempre tenía una reflexión para abrir, para aportar”.

Participación colectiva

Nelly Rovera, secretaria de Géneros y Diversidades de Chubut, desde el zoom, aportó: “Pensaba, cuando hablaron de capitalismo, en la palabra trabajo, que viene de tripallium, que en latín significa instrumento de tortura. La imagino como una palabra bien capitalista. Pienso que podríamos empezar a usar la palabra «laburo» porque modificar el uso del lenguaje también tiene que ver con luchar contra el capitalismo”.

Noel Martínez, socióloga, que fue alumna de Horacio y de Alcira, sumó su voz: “el lenguaje es determinante, me acuerdo de cuando Macri hablaba de República, yo pensaba entonces yo la voy a nombrar de otra manera porque su manera de nombrarla no me representa”.

Joaquín Andrade, del Frente Amplio de Uruguay, dijo: “pensaba cómo el sistema quiere que separemos el trabajo manual del intelectual. Cómo esas figuras tan reaccionarias se repiten como Bolsonaro y Trump, lo importante de conocer pensadores como Horacio que no se dejaron vencer por la resignación y que siguieron luchando”.

Claudia Canteros, secretaria de Formación de ATE en el Norte del país, también compartió: “celebro este espacio de conexión entre los intelectuales y la clase trabajadora porque necesitamos incorporar sobre todo en estos tiempos tan complejos actuar con todos los desafíos que eso implica para nosotros y nosotras como trabajadores y trabajadoras. Este tipo de charlas me parecen vitales para darle más profundidad a nuestra discusión política dentro del sindicato y de la Central”.

Participaron también Beto González, secretario de Organización de la CTA, Joana Jiménez, secretaria de Juventudes, Mónica D’Elía, integrante del equipo de Formación, Viviana Santarán, coordinadora administrativa del IEF, entre otros y otras compañeras y militantes.

El próximo encuentro será sobre John William Cooke, el 25 de octubre a las 18.

Tras el primer encuentro sobre el pensamiento de Alcira Argumedo, en esta nueva instancia se profundizará sobre la obra y producción del destacado sociólogo Horacio Gonzalez. Los próximos encuentros programados abordarán las obras de John William Cooke y Dora Barrancos.

Primer encuentro del Seminario de Pensamiento Nacional y Popular del IEF: Alcira Argumedo

Con la presencia de Juan Pablo Olsson, sociólogo e hijo de Alcira Argumedo, integrantes de Idearios desde el Sur y Daniel Godoy, Cocoordinador del IEF, se desarrolló en la sede de la CTA la primer etapa del seminario en el cual se abordó la obra y el pensamiento de Alcira Argumedo. El segundo encuentro será el 20 de septiembre, sobre Horacio González.

Con la participación de dirigentes, dirigentas y militantes de Chubut, Córdoba, Santa Fe, Tierra del Fuego, Buenos Aires, comenzó el ciclo 2023 del Seminario de Formación Permanente sobre Pensamiento Nacional y Popular de Idearios desde el Sur, del IEF y de la Secretaría de Formación de la CTA.

Este primer encuentro fue sobre Los silencios y las voces de América Latina, de Alcira Argumedo. El miércoles 20 de septiembre será sobre Horacio González, el 25 de octubre sobre John William Cooke y el 22 de noviembre sobre Dora Barrancos.

Daniel Godoy, Coordinador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, junto a Tomás Raffo, fue el encargado de abrir el encuentro. Godoy contó que el Seminario propone debatir acontecimientos, ideas, proyectos y procesos históricos desde la perspectiva del Pensamiento Nacional y Popular. Volver a reflexionar sobre el surgimiento y el desarrollo de los movimientos populares en Argentina y América Latina, tejiendo puentes con el presente, marcado por la reinstalación de políticas neoliberales en todo el mundo y por la resistencia del movimiento popular.

Luego fue el turno de Inés Hayes, Coordinadora de Idearios desde el Sur, quien enmarcó el pensamiento de Alcira en la década de los 60 durante la conocida Primavera de los Pueblos cuando la lucha de los movimientos populares en todo el mundo daba sus frutos contra el capitalismo imperialista. “Fue la época de las descolonizaciones de África, de la Revolución Cubana, del Cordobazo, del nacimiento de los Sacerdotes del Tercer Mundo, del nacimiento del Movimiento de los Países no Alineados”, dijo Hayes.

Fermín Arocena, integrante de Idearios desde el Sur, expuso sobre cómo se constituyó teóricamente el pensamiento popular latinoamericano, sus particularidades de formación y cómo las ideas de Alcira surgen de la crítica a la matriz del pensamiento tradicional eurocentrista. “El pensamiento propio se construye a partir del reconocimiento de la diversidad y la heterogeneidad de las identidades socio-culturales propias. Como esas identidades, más allá de las diferencias y contradicciones que pueda haber entre ellas, conforman un nosotros que pervive a lo largo de las experiencias traumáticas de América Latina y es el corazón de las resistencias y formas de organización popular”, dijo Arocena.

“Para Alcira, en el proceso de construcción de una matriz crítica de pensamiento, que atienda a las particularidades de nuestras tierras y pueda ser transformadora de la realidad, es ineludible recuperar lo que ella llama ‘la otra cara de la conquista’, ‘la versión de los vencidos’. Es decir, es necesario ahondar en la historia de un sujeto que fue totalmente relegado por las teorías tradicionales y excluido de las versiones hegemónicas”, aportó en su exposición Violeta Godoy, también integrante de Idearios desde el Sur.

Juan Pablo Olsson, sociólogo e hijo de Alcira Argumedo fue el encargado de cerrar: “Con su pensamiento, Alcira nos ayudó a encontrar las claves para pensarnos como sujetos protagonistas de construcción de un destino, en donde está en juego la agenda de los grupos poderosos: los bancos, las corporaciones y las potencias en un contexto de la carrera por las corporaciones y en las potencias por los últimos recursos que quedan en el planeta. Y en donde esa agenda y el calentamiento global ponen en juego ubicarnos a nosotros en América Latina, África y el sudeste asiático en las poblaciones más pobres, las que más van a sufrir los efectos del calentamiento global. Somos una población de alrededor de 3.500 y 4.000 millones de personas que estamos expuestas a ser sometidos como población sobrante y territorios de sacrificio”.

Olsson celebró además la iniciativa del IEF de construir estos espacios de debate e intercambios para poder llevar adelante, desde el poder popular, un país y un continente en el que quepamos todos y todas.

También estuvieron presentes Tomás Raffo, Economista y Co-coordinador del Ief, quien contó su relación personal con Alcira con mucho afecto y respeto, Leonor Cruz, Secretaria de Géneros y Diversidades, quien aplaudió el encuentro y reconoció en Argumedo a una militante y luchadora feminista y Cecilia Fernández Lisso, responsable del trabajo gráfico y visual de los dossiers de Idearios desde el Sur.

Los y las participantes de este primer encuentro, tanto quienes están presencialmente como quienes lo hicieron desde la virtualidad (como Ana Romero, de Formación del IEF) expresaron la necesidad de seguir llevando adelante iniciativas de formación desde la clase trabajadora, para la propia clase en pos de construir un futuro con justicia social.

Viviana Santarán fue la encargada de la gestión administrativa e institucional, mientras que Julián Zerbarini Acosta brindó el apoyo técnico para que el seminario fuera posible en su modalidad virtual.

El Seminario de Formación Permanente Pensamiento Nacional y Popular, ciclo 2023, del IEF. continuará con tres encuentros en los que se abordará la obra y el pensamiento de Horacio González, John William Cooke y Dora Barrancos. La participación tendrá las modalidades presencial y virtual.

Para consultas se puede escribir al correo del Instituto:

ief@ctanacional.org


El Seminario propone debatir acontecimientos, ideas, proyectos y procesos históricos desde la perspectiva del Pensamiento Nacional y Popular. Volver a reflexionar sobre el surgimiento y el desarrollo de los movimientos populares en Argentina y América Latina, el rol de los liderazgos políticos, los Estado-Nación frente a los poderes trasnacionales, la construcción de la soberanía política, la independencia económica, la justicia social, la emancipación y la autonomía, las identidades nacionales, el movimiento originario, el movimiento obrero y el sindicalismo, el imperialismo y la dominación cultural. Consideramos que para poder llevar adelante ese objetivo, el conocimiento de quienes contribuyeron a construir el pensamiento nacional y latinoamericano, es imprescindible.
Partimos de entender las realidades de las sociedades latinoamericanas como resultantes de conflictos en el marco de relaciones de poder, atravesadas por cuestiones de clase, de etnia, de género, de territorio. En este sentido no puede quedar afuera la división internacional del trabajo, el colonialismo y el imperialismo.
Nos proponemos dar sentido a estas temáticas, tejiendo puentes con el presente, marcado por la reinstalación de políticas neoliberales en todo el mundo y por la resistencia del movimiento popular. Frente a un modelo social y económico que intenta atomizar, individualizar toda cuestión social, enajenándola de todo carácter colectivo, forjar subjetividades obedientes, sin herramientas para la resistencia y funcionales a los intereses de los sectores concentrados del poder económico, creemos que esta Formación es fundamental no sólo para reconocer cómo operan hoy los poderes concentrados sino para tomar fuerza de nuestras resistencias y luchas pasadas y presentes.

Programa completo del Seminario en formato PDF:

A continuación compartimos los dossier sobre Alcira Argumedo y Horacio González publicados en la colección Idearios desde el Sur

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